4 hábitos para una vida saludable

Cómo llevar una vida saludable es una pregunta que muchos de nosotros nos hacemos habitualmente. En este artículo te daremos cuatro pequeños consejos que te pueden ayudar a llevar una vida con salud, todos a tu alcance.

4 hábitos para llevar una vida saludable

Según un estudio realizado por el Johns Hopkins Institute, que abarcó a 6.200 hombres y mujeres durante más de ocho años, se ha descubierto que aquellos que han seguido hábitos de vida saludables reducen la probabilidad de sufrir problemas derivados del sobrepeso y la vida sedentaria.

No fumes

Aunque el mejor plan para llevar un estilo de vida saludable y sentirse mejor es adoptar cada uno de estos cuatro hábitos al mismo tiempo, si tuvieras que elegir solo uno de ellos, según los investigadores, sería éste.

Fumar no sólo afecta a las arterias coronarias y los pulmones, los fumadores también tienen tasas más altas de cáncer y riesgo de infarto. Fumar afecta a muchos sistemas de órganos, debilitando el organismo y exponiéndolo a todo tipo de enfermedades.

Además del cáncer, fumar cigarrillos causa graves enfermedades pulmonares, de las que alrededor de un 90 por ciento de muertes por obstrucción pulmonar son debidas a este nefasto hábito.

Fumar es muy perjudicial para las personas de tu entorno, agravando notablemente los síntomas de asma en aquellos que te rodean.

Cuida tu peso

Las personas más saludables de este estudio mantenían un índice de masa corporal adecuado.

El IMC o índice de masa corporal es una relación entre altura y peso que mide la masa corporal y se mide según los siguientes valores:

Para averiguar cuál es tu IMC adecuado, puedes acudir a tu médico de cabecera o a un nutricionista que a bien seguro podrá proporcionarte una guía de nutrición adecuada a tu estilo de vida, así como una pequeña rutina de ejercicios o unas simples pautas de vida saludable.

Levántate y muévete

Intenta realizar al menos 30 minutos de actividad deportiva diaria todos los días de la semana ¡Solo los fines de semana no es suficiente! Si es más fácil para ti, intenta dividir la actividad en bloques de 10 minutos cada uno, por ejemplo, 10 minutos de caminata por la mañana, 10 minutos más de caminata después del almuerzo y 10 minutos después de la cena.

Todos los ejercicios deberán ser adecuados a distintos factores como la capacidad del individuo, edad y problemas o lesiones anteriores y, si es posible y con el tiempo, aumentar el nivel de exigencia de los mismos.

Siempre hay una máxima que debemos cumplir y es que todos podemos hacer ejercicio a nuestro nivel. Muy pronto vas a poder comprobar como un poco de dedicación vas a obtener gratificantes resultados en muy poco tiempo.

Para nuestros mayores una actividad muy saludable es la simple acción de andar. Una buena caminata hace trabajar nuestro sistema cardiovascular y nos permite además «quemar» algunas calorías.

Elige comida sana

Este estudio descubrió que las personas más sanas de este grupo seguían una dieta de estilo mediterráneo. Una dieta variada y rica en frutas frescas y vegetales, frutos secos que contienen aceites sanos, más pescado (y menos carne roja), carbohidratos de cereales completos y aceite de oliva virgen para cocinar.

Igualmente importante es tener en cuenta las calorías en nuestra alimentación.  La ingesta de calorías siempre deberá ser adecuada a nuestro estilo de vida , por lo que en este caso siempre es recomendable contar con un profesional nutricionista que nos marque unas pautas de alimentación adecuadas y saludables.

Sin lugar a dudas, la dieta debe ser la mitad de nuestro esfuerzo junto al ejercicio si queremos lograr el objetivo de mantener un peso adecuado. Todos estos pequeños consejos son de aplicación básica para poder llevar una vida saludable.

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